Ilumine sus interiores con la lámpara colgante Reykjavik de cristal degradado blanco, una sofisticada luminaria con un diseño sencillo y elegante. Su pantalla de cristal degradado lechoso difunde una luz suave y relajante, ideal para crear un ambiente acogedor y contemporáneo en el comedor, la sala de estar o el dormitorio.

Con sus 25 cm de diámetro y altura ajustable hasta 280 cm, esta lámpara colgante se adapta perfectamente a sus espacios, ya sean íntimos o amplios. Su cable textil bicolor y su discreta base de techo garantizan un acabado impecable y elegante.

Una elección perfecta para quienes buscan una luminaria moderna, versátil y atemporal capaz de aportar calidez y luminosidad a su diseño interior.