Esta lámpara colgante difunde una luz suave y cálida, perfecta para crear un ambiente tranquilo y acogedor. Su pantalla de vidrio blanco, con su diseño floral ligeramente plisado y acampanado, permite que la luz fluya delicadamente hacia abajo, creando un halo armonioso que suaviza la estancia al instante. Su tono cálido aporta una agradable sensación de confort al anochecer.

La combinación de vidrio opalino, una tapa de latón pulido y un cable textil decorativo la convierte en un auténtico detalle nórdico-vintage. Los detalles de vidrio aportan sutiles reflejos y una encantadora profundidad, mientras que la silueta del difusor evoca un encanto elegante y ligeramente retro. Una opción ideal para quienes disfrutan de una luz suave y envolvente.

Sobre un pequeño comedor, en un dormitorio o en un rincón de lectura, esta lámpara colgante crea un punto focal delicado y refinado, perfecto para transformar cada noche en un momento acogedor.